¡Hola de nuevo!
Si os gustó la *primera parte* de nuestro viaje por la capital británica, hoy continuamos con la visita virtual por Londres.
Día 3.
Tras desayunar en el hotel, cogimos el metro hasta Baker Street para visitar la primera atracción del día. Os recomendamos encarecidamente madrugar, aunque aún así no os libraréis de las colas, puesto que el museo de cera de Madame Tussauds es una de las atracciones más populares de Londres. Creo recordar que llegamos a eso de las 10 y entramos al museo a la 1 de la tarde. Creo que con eso lo digo todo.
La estación más cercana a Madame Tussauds es la de Baker Street. Desde allí, el museo está a unos 2 minutos andando.
¿Recordáis que os dijimos que habíamos aprovechado nuestro viaje en tren con Southern para ahorrar un dinerillo visitando la ciudad? Pues conservando vuestro billete de ida y vuelta al aeropuerto, podéis descargaros unos cupones de 2x1 que os vendrán la mar de bien, ya que atracciones como Madame Tussauds NO están incluídas en la tarjeta turística London Pass.
Una vez provistos de vuestros cupones 2x1 y con los billetes de tren, os tenéis que poner a la cola en la fila número 1.
Supongo que habréis oído maravillas sobre este museo, donde el parecido con el famoso original está casi siempre muy conseguido. Pues es cierto.
Me gustaría destacar también que no hay ningún problema en sobetear un poco las figuras, cogerlas de la mano para haceros una foto, etc.
Allí encontraréis celebridades de todo tipo: actores de Bollywood (¡nada más entrar!) y Hollywood, deportistas de fama internacional como Nadal o Usain Bolt y personajes históricos como Shakespeare o Einstein. Obviamente, hay una sección dedicada a la familia real, donde empleados del museo te sacan una foto posando con ellos.
También hay espacio para cantantes de ayer y de hoy, además de una galería de superhéroes. La entrada incluye la proyección de un corto en 4D, similar al que vimos en el museo de los Beatles de Liverpool. El corto reúne a los personajes más conocidos de los cómics de Marvel.
Acabamos la visita a eso de las 3 de la tarde. Habíamos pensado comer en un restaurante italiano justo enfrente, pero al salir... ¡diluviaba! y decidimos hacerlo en la pequeña cafetería del museo.
La siguiente atracción que visitamos, animadas por la tarde desapacible fue la noria del London Eye. Abre todos los días de 10 a 21:30, así que está bien dejarla para un día en el que no os dé tiempo a ver más museos.
Afortunadamente, no tuvimos que hacer demasiada cola. Primero tenéis que ir al edificio principal para comprar vuestra entrada y luego ya poneros a la cola correspondiente para acceder a la noria.
Al igual que en Madame Tussauds, aprovechamos las ofertas del 2x1 de National Rail, puesto que la entrada a esta atracción tampoco está cubierta por las tarjetas turísticas como la London Pass.
La estación de metro más cercana es London Waterloo. Desde allí, lo mejor es preguntar cómo llegar a la Noria, puesto que se echa de menos alguna señalización.
Tras esperar a la cola, llegó el turno de subirnos a la cápsula. Lo curioso es que habitualmente el acceso y la salida se hacen en movimiento, sin que se pare.
Marian iba con algo de miedo, ya que sufre de vértigo, pero no tuvo ningún problema en subir ni bajar de la cápsula, ni durante el paseo, ya que el movimiento es prácticamente imperceptible. En youtube tenéis videos del paseo, para que os hagáis una idea de cómo es la experiencia.
Dentro de la cápsula hay un banco para sentarse o dejar vuestras cosas, y monitores con información sobre los distintos edificios que se ven. Marian, como no, sacó muchas fotos. Para evitar los reflejos de los cristales, le puso el filtro polarizador a su réflex.
Decidimos visitar una última atracción antes de dar la jornada por terminada.
Piccadilly Circus es probablemente la intersección más famosa de Londres y un buen punto de encuentro, puesto que hay muchas tiendas y zonas de entretenimiento cerca.
Podéis llegar allí en metro con la línea Bakerloo (marrón) o con la línea del mismo nombre (Piccadilly), de color azulón.
Estuvimos haciendo compras en Boots.
Como siempre, os enseñaremos nuestras compras en Londres en una entrada aparte.
Día 4.
Empezamos a utilizar nuestra London Pass.
Decidimos estrenarla visitando el Wimbledon Lawn Tennis Museum, un pequeño museo dedicado al deporte de caballeros por excelencia, el tenis, y en particular al torneo más famoso -y antiguo del mundo, disputado sobre hierba.
El museo abre de 10 a 17:30.
La estación de metro más cercana es Southfield.
Queda a 15 minutos andando del estadio. Si queréis, podéis coger el autobús 493.
Como acababa de terminar el torneo de Wimbledon, no pudimos visitar las pistas, una pena, la verdad. Molaría habernos hecho fotos en la Pista Central.
La visita al museo no os llevará demasiado tiempo, ni tampoco hay colas.
Regresamos al centro de Londres para visitar la siguiente atracción del día, la Abadía de Westminster.
Las estaciones de metro más cercanas son Westminster y St. James's Park.
Nosotras paramos en Westminster.
Se puede visitar de 11 a 15:30.
Es el lugar tradicional para los entierros y coronaciones de los monarcas británicos.
No se pueden hacer fotos en la abadía, pero sí en el claustro y en los jardines para uso personal.
Cuando acabamos de visitar la abadía era ya la hora de comer, así que comimos allí mismo, en el restaurante Cellarium. Comimos las dos por unas 43 libras (unos 53 euros).
Intentamos exprimir un poco más la jornada (y la Pass, cómo no) y nos acercamos al Museo Florence Nightingale, que a Marian, como enfermera, le hacía mucha ilusión visitar.
Florence Nightingale sentó las bases de la profesionalización de la enfermería con el establecimiento, en 1860, de su escuela de enfermería en el Hospital St. Thomas, de Londres. Fue la primera escuela de enfermería laica del mundo.
Lo cierto es que llegamos un poco justas, porque siempre nos entretenemos haciéndonos alguna foto y nos costó un poco encontrar la entrada del museo.
Faltaba una media hora para el cierre, así que yo lo vi un poco por encima, dejé a Marian visitándolo y me acerqué a la tienda de regalos para cogerle alguna chorradita de temática enfermeril.
El museo abre todos los días de 10 a 17.
Personalmente, el museo se centra bastante en la vida de Florence, con muchos paneles con información sobre su vida y su labor, pero si os dedicáis a la medicina o enfermería, hay otra visita más interesante que hacer en Londres. Ya os hablaré de ella en la próxima entrega.
A las 5 de la tarde, casi no hay más sitios que visitar, porque es la hora a la que casi todos cierran.
Decidimos terminar nuestra jornada turística con un crucero por el Támesis, que también estaba incluído con la London Pass.
Elegimos la compañía Red River Rover de City Cruises.
El crucero sale desde 4 muelles: Westminster, Waterloo, Tower y Greenwich.
Nosotras lo cogimos desde Westminster, con horario de 10 a 19h, y salen más o menos cada 30'.
Bien, aquí termina nuestra segunda entrega de esta guía de viaje.
Esperamos que os haya gustado.
Hasta pronto.
Si os gustó la *primera parte* de nuestro viaje por la capital británica, hoy continuamos con la visita virtual por Londres.
Día 3.
Tras desayunar en el hotel, cogimos el metro hasta Baker Street para visitar la primera atracción del día. Os recomendamos encarecidamente madrugar, aunque aún así no os libraréis de las colas, puesto que el museo de cera de Madame Tussauds es una de las atracciones más populares de Londres. Creo recordar que llegamos a eso de las 10 y entramos al museo a la 1 de la tarde. Creo que con eso lo digo todo.
¿Recordáis que os dijimos que habíamos aprovechado nuestro viaje en tren con Southern para ahorrar un dinerillo visitando la ciudad? Pues conservando vuestro billete de ida y vuelta al aeropuerto, podéis descargaros unos cupones de 2x1 que os vendrán la mar de bien, ya que atracciones como Madame Tussauds NO están incluídas en la tarjeta turística London Pass.
Una vez provistos de vuestros cupones 2x1 y con los billetes de tren, os tenéis que poner a la cola en la fila número 1.
Supongo que habréis oído maravillas sobre este museo, donde el parecido con el famoso original está casi siempre muy conseguido. Pues es cierto.
Me gustaría destacar también que no hay ningún problema en sobetear un poco las figuras, cogerlas de la mano para haceros una foto, etc.
Allí encontraréis celebridades de todo tipo: actores de Bollywood (¡nada más entrar!) y Hollywood, deportistas de fama internacional como Nadal o Usain Bolt y personajes históricos como Shakespeare o Einstein. Obviamente, hay una sección dedicada a la familia real, donde empleados del museo te sacan una foto posando con ellos.
También hay espacio para cantantes de ayer y de hoy, además de una galería de superhéroes. La entrada incluye la proyección de un corto en 4D, similar al que vimos en el museo de los Beatles de Liverpool. El corto reúne a los personajes más conocidos de los cómics de Marvel.
Acabamos la visita a eso de las 3 de la tarde. Habíamos pensado comer en un restaurante italiano justo enfrente, pero al salir... ¡diluviaba! y decidimos hacerlo en la pequeña cafetería del museo.
La siguiente atracción que visitamos, animadas por la tarde desapacible fue la noria del London Eye. Abre todos los días de 10 a 21:30, así que está bien dejarla para un día en el que no os dé tiempo a ver más museos.
Afortunadamente, no tuvimos que hacer demasiada cola. Primero tenéis que ir al edificio principal para comprar vuestra entrada y luego ya poneros a la cola correspondiente para acceder a la noria.
Al igual que en Madame Tussauds, aprovechamos las ofertas del 2x1 de National Rail, puesto que la entrada a esta atracción tampoco está cubierta por las tarjetas turísticas como la London Pass.
La estación de metro más cercana es London Waterloo. Desde allí, lo mejor es preguntar cómo llegar a la Noria, puesto que se echa de menos alguna señalización.
Marian iba con algo de miedo, ya que sufre de vértigo, pero no tuvo ningún problema en subir ni bajar de la cápsula, ni durante el paseo, ya que el movimiento es prácticamente imperceptible. En youtube tenéis videos del paseo, para que os hagáis una idea de cómo es la experiencia.
Dentro de la cápsula hay un banco para sentarse o dejar vuestras cosas, y monitores con información sobre los distintos edificios que se ven. Marian, como no, sacó muchas fotos. Para evitar los reflejos de los cristales, le puso el filtro polarizador a su réflex.
Decidimos visitar una última atracción antes de dar la jornada por terminada.
Piccadilly Circus es probablemente la intersección más famosa de Londres y un buen punto de encuentro, puesto que hay muchas tiendas y zonas de entretenimiento cerca.
Podéis llegar allí en metro con la línea Bakerloo (marrón) o con la línea del mismo nombre (Piccadilly), de color azulón.
Estuvimos haciendo compras en Boots.
Como siempre, os enseñaremos nuestras compras en Londres en una entrada aparte.
Día 4.
Empezamos a utilizar nuestra London Pass.
Decidimos estrenarla visitando el Wimbledon Lawn Tennis Museum, un pequeño museo dedicado al deporte de caballeros por excelencia, el tenis, y en particular al torneo más famoso -y antiguo del mundo, disputado sobre hierba.
El museo abre de 10 a 17:30.
La estación de metro más cercana es Southfield.
Queda a 15 minutos andando del estadio. Si queréis, podéis coger el autobús 493.
Como acababa de terminar el torneo de Wimbledon, no pudimos visitar las pistas, una pena, la verdad. Molaría habernos hecho fotos en la Pista Central.
La visita al museo no os llevará demasiado tiempo, ni tampoco hay colas.
Regresamos al centro de Londres para visitar la siguiente atracción del día, la Abadía de Westminster.
Las estaciones de metro más cercanas son Westminster y St. James's Park.
Nosotras paramos en Westminster.
Se puede visitar de 11 a 15:30.
Es el lugar tradicional para los entierros y coronaciones de los monarcas británicos.
No se pueden hacer fotos en la abadía, pero sí en el claustro y en los jardines para uso personal.
Cuando acabamos de visitar la abadía era ya la hora de comer, así que comimos allí mismo, en el restaurante Cellarium. Comimos las dos por unas 43 libras (unos 53 euros).
Intentamos exprimir un poco más la jornada (y la Pass, cómo no) y nos acercamos al Museo Florence Nightingale, que a Marian, como enfermera, le hacía mucha ilusión visitar.
Florence Nightingale sentó las bases de la profesionalización de la enfermería con el establecimiento, en 1860, de su escuela de enfermería en el Hospital St. Thomas, de Londres. Fue la primera escuela de enfermería laica del mundo.
Lo cierto es que llegamos un poco justas, porque siempre nos entretenemos haciéndonos alguna foto y nos costó un poco encontrar la entrada del museo.
Faltaba una media hora para el cierre, así que yo lo vi un poco por encima, dejé a Marian visitándolo y me acerqué a la tienda de regalos para cogerle alguna chorradita de temática enfermeril.
El museo abre todos los días de 10 a 17.
Personalmente, el museo se centra bastante en la vida de Florence, con muchos paneles con información sobre su vida y su labor, pero si os dedicáis a la medicina o enfermería, hay otra visita más interesante que hacer en Londres. Ya os hablaré de ella en la próxima entrega.
A las 5 de la tarde, casi no hay más sitios que visitar, porque es la hora a la que casi todos cierran.
Decidimos terminar nuestra jornada turística con un crucero por el Támesis, que también estaba incluído con la London Pass.
Elegimos la compañía Red River Rover de City Cruises.
El crucero sale desde 4 muelles: Westminster, Waterloo, Tower y Greenwich.
Nosotras lo cogimos desde Westminster, con horario de 10 a 19h, y salen más o menos cada 30'.
Bien, aquí termina nuestra segunda entrega de esta guía de viaje.
Esperamos que os haya gustado.
Hasta pronto.
Hi again!
If you enjoyed the *first installment* in our London Travel Guide series, here's what we did the next two days in the heart of the British Empire.
Day 3.
After having breakfast at the hotel, we got on the underground and stopped at Baker Street station to visit the first attraction of the day.
You'd better have an early start if you intend to visit the Madame Tussauds Wax Museum, as it is one of the most popular attractions in London. That may not rid you of a long queue, though.
I seem to recall we got to the end of the line at about 10am and it wasn't until 1pm that we made it to the front of the ticket office. I think that says it all.
From Baker Street station, the museum is only a 2-minute walk.
Do you remember we mentioned we'd chosen Southern Rail for outgoing transport from Gatwick as we'd then save money visiting the city? Well, all you have to do is keep your return ticket and download some vouchers to print and you'll get lots of 2x1 deals that will be really useful. Attractions like Madame Tussauds are NOT included in the London Pass, unfortunately.
Once you have your 2x1 vouchers printed and your train tickets, you'll have to go to the line for no.1 entrance.
I guess you've heard people praising this museum and how real the figures look. It's true for most of them for sure.
I'd like to tell you that another cool thing about this place is that there's not problem for visitors feeling the figures, holding hands with them while posing for shots.
You'll have celebrities to suit everyone: Bollywood actors (right by the entrance!) as well as Hollywood's, of course, sports celebrities like Nadal or Usain Bolt and historical figures such as Shakespeare or Einstein.
Needless to say there's a section devoted to British royalty, with museum staff snapping pictures of visitors posing next to them.
There's room for music stars, past and present as well as a superheroes hall. The ticket gives you access to a 4D short film, similar to the one at the Beatles Museum in Liverpool. It features Marvel comics' most famous superheroes. We were done by 3pm and had planned to have lunch at an Italian restaurant opposite the museum... only to have a downpour on the way out. We opted for having lunch inside Madame Tussauds, in the café.
The next attraction on our to-do list, prompted by the dull weather was the London Eye. It opens every day from 10am to 9.30 pm, so it's a good idea to leave it for those days when you can't squeeze any more museums given their closing times.
Fortunately we didn't have to wait too long. You'll have to go to the main building where the ticket office is located and then go back outside and wait in the corresponding line.
Just like with Madame Tussauds, we made good use of the 2x1 National Rail vouchers, as this is another atraction not included in tourist cards like the London Pass.
The closest underground station is London Waterloo. From there, we'd advise you to ask for directions, as there were no signs showing the way.
Once the wait was over, it was time to access the glass pod. Most times you'll get on and off it while it's still moving.
Marian was quite wary of the whole experience, given she doesn't have a head for heights and suffers from vertigo, but had no problem at all hopping on and off the capsule or during the ride. You can barely feel it moving.
You'll find videos of what the ride is like if you want to get a better picture of what I mean.
The capsule has seating space, where you can also leave your belongings, as well as screens with information of the different sights from your vantage.
It goes without saying Marian took lots of pictures.
To avoid as much as possible the reflection from the glass, she fitted her DSLR with a polarized (CPL) filter.
We then decided to visit another attraction before calling it a day.
Piccadilly Circus is probably the most famous intersection in London. It's a great meeting point, as there are lots of shopping and entertainment facilities nearby.
By underground, you can either get the Bakerloo line (brown) or the eponymous line (dark blue) and get off at Piccadilly Circus.
We bought some things at Boots.
As usual, we'll show you our purchases in London in a separate post.
Day 4.
We activated our London Pass tourist card. The first attraction we used it for was the Wimbledon Lawn Tennis Museum, a small museum devoted to tennis, a sport famous for fair game and to the oldest tournament in the world, played on lawn.
The museum opens from 10 to 17.30.
The nearest underground station is Southfield. It's a 15-minute walk to the stadium. If you like, you can also get bus number 493.
We were unable to visit the courts, as the tournament had just finished. A pity, really, it would have been cool to snap some pics at Central Court.
The museum visit doesn't take long and there were no queues to speak of.
We returned to downtown London for the next attraction, Westminster Abbey.
The nearest underground stations are Westminster and St. James's Park. We got off at Westminster. Visiting times are from 11 to 15.30.
It's the traditional place for coronations and the burial site for British monarchs.
Photography is not allowed inside the abbey, but there are no restrictions in the cloister and garden, as long as they are for personal use.
By the time we were done with the visit it was lunchtime, so we stayed there and had lunch at the Cellarium, the abbey's restaurant. The bill for both orders was 43 pounds (about €53).
We tried to make the most of our day (and the Pass, of course) by heading to the Florence Nightingale Museum nearby.
Florence Nightingale laid the foundations for the nursing profession by setting up the St. Thomas Hospital School of Nursing in 1860 here in London. It was the first secular school of its kind.
Marian was really looking forward to the visit, being a nurse. We were a bit pushed for time, as we got there 30 minutes before closing time. We lost some minutes taking a few pics on the way there and locating the museum entrance took us a few precious minutes as well.
Given the short time we were left with, I contented myself with a quick tour of the place and left Marian to enjoy the little time she'd be there. I popped into the museum gift shop and bought her some nursing-themed goodies.
The museum opens every day from 10 to 17.
In my opinion, everything in the museum is focused on Florence's life. You can see lots of signs with information about her life and work.
There's another place in London that you'll probably want to visit if you work in healthcare, like oddities or escaping touristy places.
We'll tell you about that in the next part of this series, so stay tuned.
There are virtually no more places to visit at 5 p.m., because all the museums close by that time.
We decided to finish our sightseeing day with a cruise along the River Thames, which is another attraction included in the London Pass.
We chose the Red River Rover of City Cruises company.
The cruise departs from 4 piers: Westminster, Waterloo, Tower and Greenwich.
We took the one departing from Westminster Pier. You can take one of these from 10.00 to 19.00, every 30 minutes.
Well, here's the end of the second part of this travel guide.
We hope you enjoyed it.
See you soon!
If you enjoyed the *first installment* in our London Travel Guide series, here's what we did the next two days in the heart of the British Empire.
Day 3.
After having breakfast at the hotel, we got on the underground and stopped at Baker Street station to visit the first attraction of the day.
You'd better have an early start if you intend to visit the Madame Tussauds Wax Museum, as it is one of the most popular attractions in London. That may not rid you of a long queue, though.
I seem to recall we got to the end of the line at about 10am and it wasn't until 1pm that we made it to the front of the ticket office. I think that says it all.
From Baker Street station, the museum is only a 2-minute walk.
Do you remember we mentioned we'd chosen Southern Rail for outgoing transport from Gatwick as we'd then save money visiting the city? Well, all you have to do is keep your return ticket and download some vouchers to print and you'll get lots of 2x1 deals that will be really useful. Attractions like Madame Tussauds are NOT included in the London Pass, unfortunately.
Once you have your 2x1 vouchers printed and your train tickets, you'll have to go to the line for no.1 entrance.
I guess you've heard people praising this museum and how real the figures look. It's true for most of them for sure.
I'd like to tell you that another cool thing about this place is that there's not problem for visitors feeling the figures, holding hands with them while posing for shots.
You'll have celebrities to suit everyone: Bollywood actors (right by the entrance!) as well as Hollywood's, of course, sports celebrities like Nadal or Usain Bolt and historical figures such as Shakespeare or Einstein.
Needless to say there's a section devoted to British royalty, with museum staff snapping pictures of visitors posing next to them.
There's room for music stars, past and present as well as a superheroes hall. The ticket gives you access to a 4D short film, similar to the one at the Beatles Museum in Liverpool. It features Marvel comics' most famous superheroes. We were done by 3pm and had planned to have lunch at an Italian restaurant opposite the museum... only to have a downpour on the way out. We opted for having lunch inside Madame Tussauds, in the café.
The next attraction on our to-do list, prompted by the dull weather was the London Eye. It opens every day from 10am to 9.30 pm, so it's a good idea to leave it for those days when you can't squeeze any more museums given their closing times.
Fortunately we didn't have to wait too long. You'll have to go to the main building where the ticket office is located and then go back outside and wait in the corresponding line.
Just like with Madame Tussauds, we made good use of the 2x1 National Rail vouchers, as this is another atraction not included in tourist cards like the London Pass.
The closest underground station is London Waterloo. From there, we'd advise you to ask for directions, as there were no signs showing the way.
Once the wait was over, it was time to access the glass pod. Most times you'll get on and off it while it's still moving.
Marian was quite wary of the whole experience, given she doesn't have a head for heights and suffers from vertigo, but had no problem at all hopping on and off the capsule or during the ride. You can barely feel it moving.
You'll find videos of what the ride is like if you want to get a better picture of what I mean.
The capsule has seating space, where you can also leave your belongings, as well as screens with information of the different sights from your vantage.
It goes without saying Marian took lots of pictures.
To avoid as much as possible the reflection from the glass, she fitted her DSLR with a polarized (CPL) filter.
We then decided to visit another attraction before calling it a day.
Piccadilly Circus is probably the most famous intersection in London. It's a great meeting point, as there are lots of shopping and entertainment facilities nearby.
By underground, you can either get the Bakerloo line (brown) or the eponymous line (dark blue) and get off at Piccadilly Circus.
We bought some things at Boots.
As usual, we'll show you our purchases in London in a separate post.
Day 4.
We activated our London Pass tourist card. The first attraction we used it for was the Wimbledon Lawn Tennis Museum, a small museum devoted to tennis, a sport famous for fair game and to the oldest tournament in the world, played on lawn.
The museum opens from 10 to 17.30.
The nearest underground station is Southfield. It's a 15-minute walk to the stadium. If you like, you can also get bus number 493.
We were unable to visit the courts, as the tournament had just finished. A pity, really, it would have been cool to snap some pics at Central Court.
The museum visit doesn't take long and there were no queues to speak of.
We returned to downtown London for the next attraction, Westminster Abbey.
The nearest underground stations are Westminster and St. James's Park. We got off at Westminster. Visiting times are from 11 to 15.30.
It's the traditional place for coronations and the burial site for British monarchs.
Photography is not allowed inside the abbey, but there are no restrictions in the cloister and garden, as long as they are for personal use.
By the time we were done with the visit it was lunchtime, so we stayed there and had lunch at the Cellarium, the abbey's restaurant. The bill for both orders was 43 pounds (about €53).
We tried to make the most of our day (and the Pass, of course) by heading to the Florence Nightingale Museum nearby.
Florence Nightingale laid the foundations for the nursing profession by setting up the St. Thomas Hospital School of Nursing in 1860 here in London. It was the first secular school of its kind.
Marian was really looking forward to the visit, being a nurse. We were a bit pushed for time, as we got there 30 minutes before closing time. We lost some minutes taking a few pics on the way there and locating the museum entrance took us a few precious minutes as well.
Given the short time we were left with, I contented myself with a quick tour of the place and left Marian to enjoy the little time she'd be there. I popped into the museum gift shop and bought her some nursing-themed goodies.
The museum opens every day from 10 to 17.
In my opinion, everything in the museum is focused on Florence's life. You can see lots of signs with information about her life and work.
There's another place in London that you'll probably want to visit if you work in healthcare, like oddities or escaping touristy places.
We'll tell you about that in the next part of this series, so stay tuned.
There are virtually no more places to visit at 5 p.m., because all the museums close by that time.
We decided to finish our sightseeing day with a cruise along the River Thames, which is another attraction included in the London Pass.
We chose the Red River Rover of City Cruises company.
The cruise departs from 4 piers: Westminster, Waterloo, Tower and Greenwich.
We took the one departing from Westminster Pier. You can take one of these from 10.00 to 19.00, every 30 minutes.
Well, here's the end of the second part of this travel guide.
We hope you enjoyed it.
See you soon!
Qué recuerdos! El London Eye, la abadía... Pues el museo Madame Tussauds no pude verlo y me habría encantado, pero en los tres días que estuvimos fui imposible cuadrar más actividades.
ResponderEliminarUn besazo!
Es que con el Madame Tussauds tienes para toda una mañana, y madrugando.
EliminarSi vuelves a Londres, no dejes de verlo. Fíjate que para cuando hemos publicado esta entrada, ya hay una foto desfasada (Brad Pitt y Angelina Jolie juntos).
¡Qué pasada! Me encantaría ir!
ResponderEliminarBesos
La verdad es que Londres tiene sitios preciosos para ver. Estamos ultimando la tercera parte de la guía, así que atenta, para coger ideas.
Eliminar