Hola chicas: La de hoy es una entrada que ni en mis peores pesadillas me habría imaginado escribiendo, especialmente tan pronto. Hoy, 29 de noviembre, por la mañana ha muerto Luna, mi niña peluda, con sólo 4 añitos. Llevaba un tiempo más tranquila de lo normal, pero empezamos a sospechar que algo no iba bien hace unos 10 días. No hacía más que dormir, sin moverse del mismo sitio en todo el día y un par de días después ya no quería comer ni beber. Yo soy de esas personas que no piensa siempre en algo malo como primera opción y al principio achacamos esa mayor tranquilidad a que iba siendo 'una niña mayor', a la última visita de Marian con Molly ya que hacía mucho que no se veían... pero la segunda visita al veterinario reveló una anemia bestial -no tenía apenas glóbulos rojos 'sanos'- , que debía llevar gestándose meses. Por si no lo sabéis, los gatos son demasiado sufridos y no dan señales de estar malitos hasta que están muy malitos. Ha estado con medicación de varios tipos, que no toleraba nada bien. La última en una dosis que era demasiado para ella. Estos dos últimos días han sido horribles. Pero a pesar de todo, a ratos sacaba esa fuerza que ella tenía y que me hacía albergar una pizca de esperanza. Ha muerto prácticamente en mis brazos. Le había puesto en el móvil un video de música relajante. Ayer mismo le habíamos puesto uno en la tele y se había tumbado en el sofá pidiendo mimos como siempre que le decías algo y pensé que hoy le ayudaría a estar más tranquila. Tanto mis padres como Marian la vamos a echar de menos horrores. Era - ¡Dios, cómo duele hablar de ella en pasado! - lista como ella sola: era capaz de abrir las puertas de la casa, nos seguía como un perrito: con mi madre en la cocina, encima de la encimera o de la inducción mientras cocinaba. A mí se me subía en el portátil si le parecía que llevaba demasiado tiempo delante de él, trabajando o navegando por la red. La cuarentena ha sido más llevadera con ella. Molly es un amor, pero es diferente. Se tumba en una cama y si quieres, pues ya vas tú a verla. Abrir una lata de atún al natural en esta casa y no guardarle el caldito va a ser horrible a partir de ahora. Le encantaban los mejillones y langostinos y no callaba hasta que no comía un trocito. Hacía una compañía tremenda a mis padres mientras yo estaba trabajando. Somos bastante caseros y decir: 'Luna, tengo mantita' y subirse en tu regazo era todo uno. Mañana tengo que ir a trabajar y no sé cómo hacer para aparentar que estoy bien durante 5 horas. Nuestro único consuelo ahora mismo ha sido que ha tenido 4 años en los que ha vivido como una reina. La tenemos desde que tenía unos 3 meses: vivía en una especie de caseta, en la huerta de unos primos en un pueblo cercano, con el resto de su camada y un perro guardián, todos llenos de pulgas. Os dejo con la que creo que es su última foto -tenemos miles de ella en los móviles-. Hace unos días estrené cama y aún malita, no pudo evitar subirse para darle su aprobación. Sé que muchas de vosotras tenéis mascota y que sabéis qué duro es perderlas. |
Hi girls, Today is a post I'd never imagined myself writing, especially so early. This morning, today, November 29th, my beloved Luna, my furry daughter, has passed away. She'd been more subdued than usual for some time, but we were convinced there was something really wrong with her about ten days ago. All she did was sleep in the same spot and got to the point that she refused food and water. I'm the kind of person who never thinks about the worst case scenario when something happens, so we assumed she was just 'a mature girl' now, put it down to Marian and Molly's latest visit -it had been a while since that -... but the second visit to the vet revealed her red blood cell count was appallingly low and that must have been plaguing her for months. In case you don't know cats are rather uncomplaining and when it's evident they're sick, they're truly sick. She's been on different forms of meds for a few days, that she didn't take too well. The last one was a dose so high that she took a turn for the worse sooner than we imagined. These last two days have been hell. And yet, she could still gather enough strength to give us -or me- a glimmer of hope. She's practically died in my arms. I'd played a relaxing video on Youtube for her, because we watched one yesterday and she even curled up in the sofa the way she used to do, begging for some cuddles. I thought and sincerely hope it would help her be more calm. Both my parents and Marian are gonna miss her terribly too. She was -God, how it pains me to talk about her in the past tense!- smart beyond belief: she would open doors at home, would follow us around the house, while my mum was cooking she'd lie on the counter or the induction. With me, she would plant herself on my laptop when she considered I'd been there long enough working or surfing the web. She certainly made lockdown much more bearable. Don't get me wrong, Molly is a sweetie, but she's different. She lies in bed pretty much all day and you have to go and pay her a visit if you want to see her. Opening a can of tuna in its own juice won't ever be the same: no more saving the 'soup' for her. She loved mussels and prawns like you wouldn't believe and wouldn't stop meowing until she could try some. She kept my parents company big time while I was at work. We're all very homely and saying: 'Luna, I got a blanket on' and her jumping onto your lap pronto was a sight to behold. I got to go to work tomorrow afternoon and don't know if I'll be able to keep a straight face for 5 hours. Our only comfort at the moment is that she's lived a happy, pampered life these 4 years. We had her since she was a 3-month-old kitten: living in a shed-like home in a nearby village owned by some distant cousins, she and the rest of her cat family and a dog, all flea-infested... The picture in this post is the last I took of her myself. I got a new bed some days ago and sick as she was, she climbed up to give it her paws-up. I know some of you have pets and will know how bad it hurts to lose them. |
domingo, 29 de noviembre de 2020
Adios, mi dulce Luna / Goodbye, my sweet Luna
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Ánimo!!!Se pasa muy mal... Si uno no tiene mascotas no sabe lo mal que se pasa y la compañía y cariño que dan. Un besote enorme guapa
ResponderEliminarLo siento muchísimo. Mucho animo q con ese cariño tan incondicional que dan, se pasa fatal
ResponderEliminarLo lamento muchísimo, y te envío un abrazo muy fuerte.
ResponderEliminarLlora todo lo que tengas que llorar, no te ocultes, es peor.
Qué tristeza más grande y qué vacío dejan.
ResponderEliminarEstará siempre dentro de ti, te mando un abrazo grandísimo y el consuelo de pensar que tuvo una vida con muchísimo cuidado y amor.
Lo siento, amiga.
Gracias a todas por vuestros comentarios de ánimo. Se nota que comprendéis la situación. Ayer fui a tramitar la baja en el veterinario de Burgos, y se me partía el corazón. Quería hacerme la fuerte, pero cuando les contaba lo que le había pasado, se me saltaban las lágrimas.
ResponderEliminarUn beso a todas y gracias de todo corazón.
@Saruski: La gente que no tiene mascota no sabe la compañía que hacen y lo mucho que se les puede echar de menos, eso está claro.
ResponderEliminar@Másqueropa: Han sido días muy duros. Ya empezamos a recordar los momentos buenos sin que se nos caigan las lágrimas. Lo cierto es que tenemos intención de adoptar un gatete lo antes posible.
@Beatriz MissPotingues: Sé lo mucho que has pasado tú con tus gatos. Sí he llorado lo que sentí que necesitaba llorar y parece que no, pero hablando y llorando se desahoga uno. Muchas gracias por tus palabras.
@Noelia Cano: ¡Qué te voy a contar a ti de la compañía que hacen los peludos! Tu perrita sé que es una más de la familia y que disfrutáis de buenos paseos gracias a ella.
@Marian: Los veterinarios de Burgos sé que lo han sentido mucho también. Gracias por ahorrarme el mal trago de tener que hacerlo yo.
Muchas gracias a todas por vuestros comentarios. Aunque ha tenido una vida corta nuestra Luna, ha sido intensa y llena de cariño.